¿Tienes dudas sobre comprar Rachel Rising, nuevo título de Editorial Kamite? En Comikaze sólo podemos decirte que corras a buscarlo, pues se trata de una verdadera obra maestra del horror. Olvídate de que está impreso en blanco y negro (¿acaso eso importó con The Walking Dead?) y no te pierdas de esta maravilla del maestro Terry Moore. A continuación te dejamos este artículo, publicado hace apenas unos meses en las páginas de Comikaze #21.
Por José Antonio Cris Valdés
Un día tranquilo, como suelen ser todos
en medio del bosque cercano al poblado de Manson, hasta que un movimiento en la
tierra rompe la calma. El suelo se agrieta, se resquebraja, y de pronto una
mano se abre paso de entre las piedras. Un pie aparece, después una pierna;
luego, toda ella: se trata de Rachel, quien desesperada, busca desenterrarse a
sí misma.
Así comienza la
historia de Rachel Rising, el más reciente trabajo de
Terry Moore (sí, ése que en los años 90 cobró fama gracias a Strangers in Paradise, el cómic que le valió el Premio Eisner*.
Rachel se ha
liberado de su entierro, han pasado las primeras ocho páginas y uno ya no puede
parar de leer. Y digo mal leer, porque hasta ese
momento el silencio ha jugado un papel sepulcral en la
historia y el dibujo ha sido más que suficiente. Moore sabe jugar muy bien con
las imágenes y contar historias a través de ángulos bien trazados. En silencio,
nos atrapa.
Congelados, seguimos
espiando: en un ligero vestido negro, Rachel se encuentra a sí misma descalza y
sola en medio de la nada. Una soledad aparente, pues su desenterramiento es
presenciado por una mujer cuya inquietante serenidad potencia el misterio de lo
que ahí sucede. Rachel, desconcertada, no sabe qué le pasó e ignora que es observada
por la extraña mujer, pero nosotros no, así que ahora también participamos, tenemos
un secreto. El autor atina dando un lugar al lector, y es ahí donde somos enganchados.
De ahí en
adelante, acompañaremos a la protagonista en su búsqueda por descubrir qué le sucedió
y por qué están ocurriendo cosas tan extrañas en Manson, pues al parecer ella
no es la única que experimenta una insólita relación con la muerte. Raros sucesos
están enviando a más personas a tumbas improvisadas en el bosque, en las cuales
no duran mucho, por cierto.
¿Muertos
vivientes? ¿Neta, oootra historia de zombis?
Pues no. A pesar
de su aspecto pálido y la sanguínea oscuridad de sus ojos, Rachel es todo menos
un muerto viviente. ¿O es que todos los zombis tienen que ser asquerosos
remedos de lo humano, que caminan con torpeza mientras un ojo purulento les
cuelga por un lado y un brazo retorcido les arrastra por el otro? No para Terry
Moore. Rachel es una chica de 28 años, delgada, con piel tersa, labios gruesos
y nariz respingada; en pocas palabras, fácilmente nos enamoramos de ella.
Moore sale del cliché
del muerto viviente y nos presenta una propuesta interesante: el muerto-vivo. Rachel
piensa y actúa como una persona cualquiera, y sin embargo algo en ella la hace
diferente, ya que puede caer desde un techo y destrozar un coche con su cuerpo
sin experimentar daño (¿cuál podría sufrir un muerto?) o ver y sentir cosas que
nadie más puede.
Lo peor del caso
(para ella, porque para nosotros es muy agradecible) es que no sabe nada. ¿Qué
le pasó? ¿Por qué tiene marcas en el cuello? ¿Por qué no tiene recuerdos? ¿Es
un ángel, un fantasma o se encuentra en el limbo? Afortunadamente Moore no
pretende darnos esa información, al menos no tan fácilmente. El misterio en las
páginas de Rachel Rising hace que uno sienta como si
estuviera viendo un capítulo de Twin Peaks.**
A primera vista se
trata de un cómic sobre la muerte; sin embargo, al mismo tiempo Rachel Rising es una constante reflexión sobre la vida, a
través de un personaje fenecido que, irónicamente, no puede morir. De hecho,
cada capítulo de la serie abre con una frase de personajes tan diversos como
Platón, Benjamin Franklin, Shakespeare, Séneca o Dalí, en torno a un mismo
tema: la vida dentro de la muerte… ¿O es viceversa?
Pero no todo en el
pueblo de Manson gira en torno a Rachel, pues Moore presenta un abanico de
personalidades que enriquecen y dan realismo a la historia. El autor imparte
cátedra en el diseño de personajes, dando vida a seres con características
físicas y personalidad tan detalladas que los llenan de autenticidad, como
sucede con Jet (la mejor amiga de Rachel), una chica ruda y algo antisocial, que
a medida que avanza la historia se volverá una oscura protagonista en un giro
inesperado de la trama. Por su parte, la estupenda tía Johnny trata de ser la
voz de la razón y la cordura en medio de una situación que carece por completo de
sentido (y no es que no esté acostumbrada a hablar con los muertos, dado que
trabaja en la morgue de la ciudad). Y qué decir de la dulce Zoe, una niña de 10
años cuya ternura esconde a una asesina serial. Podemos apostar que los
personajes que acompañan a Rachel se volverán tan entrañables como los de las series
anteriores de Terry Moore.
How to draw… Rachel Rising
La maestría con
la que se cuenta la historia no sería la misma sin la calidad del dibujo de Moore.
Si bien el trazo de personajes es obviamente similar al que le conocemos (en
ocasiones Rachel nos recuerda a la inolvidable Katchoo de Strangers in Paradise),
los escenarios y el ambiente creado nos muestran a un Moore en busca de nuevos
horizontes, maduro y preocupado por contar bien una historia visualmente. La
conjugación plástica-narrativa es formidable.
El buen oficio de
Moore se refleja en la forma en que resuelve las imágenes de terror. Que el
lector no espere un cómic extremadamente oscuro y sangriento, pues el tono es
de contrastes luminosos, un arte figurativo, realista, basado en blancos y
negros sencillos pero detallados, con algunos tonos grises. No en vano en los
últimos años el autor se ha dedicado a publicar tutoriales sobre cómo dibujar (sus
ya populares How to draw… con diferentes temáticas
en cada entrega). En fin, se trata de un trabajo portentoso.
La publicación de
Rachel Rising corre a cargo de Robyn, la
esposa de Moore, a través del sello editorial que ellos mismos fundaron:
Abstract Studio. Al momento que esto se escribe, se han publicado dieciséis
números, cuya historia puede seguirse a través de los recopilatorios que el
sello ha lanzado (cada uno con seis números de la serie). De hecho, Moore ha
comentado que la historia está planeada para veinticuatro entregas, que serán compiladas
a su vez en cuatro tomos.
Altamente
recomendable, Rachel Rising es una historia de
misterio acerca de las pasiones de la vida y su inmortalidad.
*Pero
ésa es otra historia, que puede revisarse en Comikaze
#10
**Twin Peaks fue una serie televisiva de misterio, realizada
por David Lynch y Mark Frost y televisada en 1990 por la cadena ABC.
Imperdible, by the way.
Nuestro
colaborador
Licenciado en Comunicación y maestro en Sociología
por la Universidad Iberoamericana, ha sido articulista, fotógrafo y corrector
de estilo en Indie Rocks!, Replicante, Ticket Master, Velocidad Crítica
(Monterrey) y Comunidad Ibero, así como en la Editorial Hombre y
Mundo. También escribe, postea y bloggea sobre música. Síguelo en musicallimbs.blogspot.com.
2 comentarios:
creo que ya me convencieron
Ya me convencieron
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